Demasiado se tardo en explotar el escándalo de los cuernazos que le estaba pegando el maridito de la actriz y es que les sorprende?
Un hombre lleno de tatuajes, que su ex esposa es una actriz porno y es famoso por salir con las mujeres mas desprestigiadas de Hollywood deberían darle un premio por aguantarse la bragueta tanto tiempo.
Para nadie es un secreto que la vida de una actriz de Hollywwod esta destinada a dos cosas. Al éxito profesional y al fracaso sentimental (o viceversa).
Esa historia de la cenicienta mejor déjenla para los directores y escritores mediocres del entretenimiento.
Todo el mundo sabe que esas parejas de actores se pasan MESES sin verse, ya que cada película que filman, les toma meses terminarla y casi siempre las locaciones están tan distantes el uno del otro que se tienen que ver forzados a comunicarse por internet, teléfono o fax.
Ninguna relación sobrevive a larga distancia, y mucho menos si la co protagonista del actor es una Angelina Jolie (que sufre de fuego uterino), o un George Clooney que en cada país que filma se levanta una mujer diferente que lo mas que le dura es un año.
La realidad de la vida es mucho mas terrible que la de la ficción. O mejor dicho, no lo pongamos tan trágico, es menos creíble que la ficción.
Jennifer López ha tenido que dejar a un lado su carrera de cantante y actriz para caerle atrás al perro de marido que tiene. Ese es otro que casi nunca tiene la bragueta cerrada. Por eso la López se le ha pegado como un chicle al salsero boricua. Hasta ahora le ha funcionado, lo que no sabemos hasta cuando. Igual que Victoria Beckham que no le pierde el rastro a su esposo David a pesar de la cantidad de cuernos que este le ha pegado con medio mundo.
Pero volviendo al caso de la Bullock, ahora ella dizque no sabia que el marido andaba haciendo de las suyas pero miren con que tipo de mujeres por favor!
La próxima vez que Sandrita le de con casarse con un hombre, que vea mejor su curriculum sentimental para que no se lleve una sorpresa de esas que los adorados hombres les encantan darnos.
Algo bastante curioso, mientras estos angelitos andan pegando cuernos a diestra y siniestra, no se arrepienten ni tienen ningún cargo de conciencia, solo se arrepienten y aceptan que son adictos al sexo cuando se destapa el escándalo. Deberíamos cogerles pena? O hacer como mi heroína Lorena Bobbit? Al fin y al cabo, el objetivo es que aprendan la lección, verdad que si?
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