jueves, agosto 24, 2017

RECORDANDO A LOS QUE NADIE RECUERDA: RAUL CUBILLAS

RAUL CUBILLAS:  El FOTOGRAFO DE LOS TRIUNFADORES

En los años 80 Raúl Cubillas era el fotógrafo de los artistas, con oficinas y estudios en Santo Domingo, Puerto Rico, Miami y New York. Un fotógrafo que rompió con los esquemas tradicionales en la fotografía, el más cotizado de la época, lo que le permitió crear un portafolio importante de clientes en el arte, el mundo social, publicitario, económico, empresarial y político en el país. Pero una grave enfermedad termino con su vida a destiempo. Después de ser uno de los fotógrafos mas famosos y cotizados del país, hoy en día poco se sabe de el ni el trabajo que hizo. Es una pena como gente que en su tiempo fue solicitada por todos con los años ha quedado en el olvido.
Pase días investigando sobre la vida de este hombre y lo único que pude encontrar fueron varios escritos de Joseph Cáceres y este articulo de la también desaparecida Revista Rumbo de 1996, bastante interesante, donde Raúl Cubillas relata su vida después de ser diagnosticado con SIDA.



«Rumbo* DEL 20 DE DICIEMBRE DE 1995 AL 3 DE ENERO DE 1996

Raúl Cubillas: El SIDA es la enfermedad mejor diseñada para la Humanidad
POR: NORYS SANCHEZ

No hay artista ni modelo de calibre en el país que no haya posado para su cámara. Retratista de las más encumbradas familias dominicanas y colaborador asiduo de prestigiosas publicaciones internacionales, a Raúl CubiIlas, fotógrafo de profesión, con 48 años a cuestas, la vida le hizo una jugada: en 1993 se le diagnosticó HIV positivo, que tenía el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), al que describe como una de las enfermedades mejor diseñadas para la Humanidad.

“La Humanidad es tan fatalista que necesita del SIDA porque ahí entran los grupos que dicen que Dios castiga con esta enfermedad”, comenta reflexivo.

Raúl, español, combina su trabajo artístico con una nueva misión: darles esperanza, aliento o quizás valor, a aquellos que padecen del SIDA.
A él se le había diagnosticado un tipo de cáncer mortal de piel, del cual sería operado. Se sometió a una serie de análisis de sangre, incluyendo la prueba del SIDA. Los resultados salieron positivos. La esposa fue también diagnosticada HIV positivo y falleció el 31 de diciembre de 1993. El matrimonio procreó dos hijos, ahora con siete y ocho años de edad, quienes, conforme los análisis, no tienen SIDA.
Superado el impacto psicológico en que se sumergió cuando se le dijo que era HIV positivo —perdió 46 libras en tres meses—, se lanzó a indagar cuanto pudo sobre la enfermedad y la virología. Sin sentirse por un momento condenado a muerte.

P. ¿Cómo cambió tu vida?
R. Todas las tragedias cambian al ser humano; mientras más profunda, más profundo es el cambio. Cuando se trata de una enfermedad tan supuestamente mortal, tan terminal, tan estigmatizada como es el SIDA, pues el cambio es bastante profundo.
Fui miembro de la Marina norteamericana y una de las cosas en las que nos entrenan es con todo tipo de agentes biológicos y químicos. Cuando salió la noticia del SIDA, allá por 1981, pensé que se le había soltado algo a algún laboratorio; o que se trataba de un truco de las compañías de fármacos, o lo que sea, para asustar a la población, para restringir un poco la inmoralidad. Cuando me tocó, lo que hice fue investigar todo lo que es la virología. Me di cuenta de que aquí había un gran disparate, un fraude; en realidad, no cuadraba nada. Se publicitó una enfermedad no como requisito científico, sino como requisito de prensa y sensacionalismo. Todas las enfermedades conllevan una forma de categorización que tiene que ver con los postulados de Koch, que son muy sencillos. Estos postulados sostienen que para categorizar una enfermedad, tienes que tener el agente que la causa antes, durante y después. Ese agente debe ser inyectado en un primate, un orangután, un chimpancé, o un animal de laboratorio, y causar exactamente los mismos síntomas. Con el SIDA, todo eso se tiró por la ventana y se dio una rueda de prensa muy a lo Hollywood, muy estilo show-business’, con mucho sensacionalismo. Lo que se determinó por decreto de prensa es que había una enfermedad y un virus que iban a acabar con la humanidad Un virus que era más inteligente que nosotros, de acuerdo al francés Monta-ñer, uno de los colaboradores de este gran fraude. El principal criminal de todo esto, yo diría que es Roberto Gallo.
Ahora Montañer dice que el HIV no es lo que causa el SIDA, ahora está retrocediendo. Se lanzó con eso y ahora retrocede y dice que tiene que haber un co-factor. El virus de por sí no causa la enfermedad, lo que sí causa la enfermedad es el abuso de drogas recreacionales, enfermedades venéreas, abuso de fármacos, y a veces esas tres cosas en combinación. Hay otro factor muy importante, como dice Montañer; tiene que haber un co-factor. El virus de por sí no causa la enfermedad. Es imposible que un virus de por sí cause alrededor de unas 30 enfermedades. Ese es el disparate científico más grande: el que se cree eso cree en Santa Claus y en que Kennedy fue asesinado por Oswald.
Lo que tenemos aquí es un disparate irracional. El virus es en realidad una materia muerta que no tiene metabolismo, no tiene propiedad de movilizarse, es un millón de veces más pequeño que una bacteria.
El mismo Roberto Gallo fue sometido por fraude y mala conducta científica, por plagio, dos años después de supuestamente descubrir este virus. Estamos bregando con una persona que en realidad se manchó las manos con plagio y fraude.
Ahora, la humanidad en realidad es tan fatalista que necesita del SIDA; el SIDA es una de las enfermedades mejor diseñadas para la humanidad. Ahí entran los grupos a los que, dicen, Dios castiga. Todos los homosexuales se sienten aludidos. Es la enfermedad que, supuestamente, bíblicamente, va a acabar con nosotros. Entonces, todos los moralistas, todas las empresas de fármacos, todas las que manufacturan productos de gomas, guantes, condones, mascarillas...se están beneficiando. Los médicos se están beneficiando....
P. No obstante, cuando se te dijo que eras HIV positivo te atemorizaste tanto que perdiste mucho peso, te preocupaste...
R. Sí, perdí 46 libras.
P. ¿Por qué?
R. Porque uno está inmerso en una sociedad manejada por los medios de comunicación. Yo tenía mis dudas.
P. ¿Cómo fue?
R. A mí me diagnosticaron melanoma, un cáncer de la piel, sumamente mortífero. Me iban a hacer una cirugía y cuando me hice los análisis, el HIV dio positivo. Ya yo estaba condenado a muerte con el melanoma, quiero decir, que la condena de muerte del SIDA no era nada para mí porque no te pueden matar dos veces. Es como si a un criminal lo condenaran dos veces a morir. El melanoma sí me preocupaba, no el SIDA. Mi esposa sí estaba preocupada. Al dar yo positivo, lógicamente ella lo estaría también y así fue.


P. ¿Cómo se curó el melanoma?
R. El melanoma se curó con ozono, lo mismo que el supuestamente SIDA que yo tenía.
P. ¿Y tu esposa?
R. Los dos nos sometimos al tratamiento de ozono en Sosúa. Mi esposa, por tres meses; yo, por cinco. El error de ella fue que empezó a comer de todo, porque así se lo sugirieron los médicos para que recuperara las 20 libras que había perdido. Yo no. Desde ese entonces y hasta ahora sólo como frutas y vegetales crudos. Tanto a ella como a mí, los análisis, luego del tratamiento, nos daban negativos.
Ella murió ocho meses después de diagnosticársele. Ella se desplomó totalmente, estaba en muy buenas condiciones; pero, al diagnosticársele que era HIV positivo se desplomó. Ella murió el 31 de diciembre de 1993. Para ella fue una condena de muerte que no pudo rebasar. Se deprimió, en fin-...se debilitó. El gran secreto de curar esta enfermedad está ahí. Esta enfermedad no mata, contrario a toda la publicidad. Número uno, todos vamos a morir, pero ésta no es una enfermedad mortífera, lo es cuando te suministran fármacos como el AZT, absolutamente un veneno. Es simplemente una quimioterapia para leucemia, totalmente venenoso. Es tan tóxico que la gente que lo maneja debe tener mascarilla, guantes y una ropa protectora. Esos son los científicos que manejan 25 miligramos y a los sidosos les dan entre 500 y 1,500 miligramos diarios. Entonces, la profecía se cumple. El SIDA mata, sí, mata a través de lo que tú tomas.
P. Tus hijos, ¿tienen SIDA?
R. No. Es posible que ellos hayan salido con la enfermedad, pero pueden modificar su sistema inmunológico a medida que van creciendo. Además, luego de someterlos al tratamiento de ozono y cambiarles completamente sus hábitos alimenticios , todas las pruebas les dan negativas. He tenido problemas con ellos en algunos colegios por este tema, pero finalmente los sometí a unas pruebas de laboratorio y al dar negativas, ahora están estudiando en un colegio sin ningún
problema. Ellos son vegetarianos como yo. Comen frutas tres veces al día. No comemos nada que sea producto animal.
P. ¿Crees entonces que se está matando a la Humanidad?
R. Han matado legalmente medio millón de personas en los últimos ocho años, y alguien va a tener que pagar por esos crímenes. Todos los que proponen el uso de AZT para mí son criminales, asesinos, están implicados en genocidio, desde el que lo fabrica, hasta el que lo vende y el que lo administra.
P. ¿Cómo ha cambiado tu visión hacia la Humanidad?
R. Para mí la Humanidad en realidad está bastante perdida. En materia de nutrición, hemos sido engañados. Desde el momento en que dejamos el seno de nuestra madre, hemos sido engañados. El ser humano está diseñado para comer frutas solamente, somos básicamente primates. No somos perros diseñados para comer los desperdicios, que es lo que hemos hecho de nuestra vida. Tenemos una longevidad para nuestra especie de aproximadamente 150 años; sin embargo, nos conformamos con vivir 75 años. Somos el animal más enfermo del planeta tierra y eso se debe a lo que comemos. Nos explotamos a nosotros mismos. La medicina moderna vive de la enfermedad, no de la salud. ¿A quién le conviene que tú comas carne y leche? Al que las vende y, finalmente, al médico. Sin embargo, los primates avanzados, como el orangután y el chimpancé, son 99.9% genéticamente igual a nosotros y los que viven libremente no sufren de ninguna enfermedad degenerativa como nosotros. Mueren de viejo, no por degeneración.
Cubillas: "la medicina moderna vive de la enfermedad, no de la salud".
P. ¿Qué entonces le recomiendas a la Humanidad?
R. Comer frutas.                                       
P. ¿Pero aparte de eso, respecto a lo que está sucediendo conforme tu visión y respecto al SIDA ?
R. Bueno...todo comienza con lo que comes. Lo que comes te afecta sicológicamente. Tú no eres un cementerio para animales. Recuerda que el sexto mandamiento dice no matarás y no especifica a quién no matarás. Ahí dice no matarás. El ser humano no perdió el Paraíso, nunca salió del Paraíso. En realidad, la fruta prohibida era quizás los animales que comenzamos a matar. Yo como frutas tres veces al día y estoy en perfecta salud, trabajo un promedio de 18 horas. Me siento mejor ahora a los 48 años que a los 20. Recuperé mi vista, mí pelo, mi memoria...
P. ¿Perdiste todo eso a consecuencia de virus del SIDA?
R. No, no, no digas virus, yo lo perdí como producto de sífilis, porque lo que yo tenía era sífilis. Mi esposa tenía sífilis. Lo que pasa es que ya la sífilis, las mutaciones que hay con la sífilis, no se pueden contrarrestar con antibióticos. Ahora tú tienes como tres o cuatro tipos de sífilis: la que todavía puedes curar y hay otras, el 75% de las sífilis, incurables. Y la sífilis y el SIDA son idénticos. Tú miras los síntomas de una y de otra y son idénticos. La sífilis es el gran imitador porque imita casi todas las enfermedades. Ya no es tan fácil diagnosticar sífilis.
P. Entonces, cuando te hicieron el análisis en 1993, ¿qué te dio positivo? ¿El HIV?
R. HIV positivo. ¿Qué implica HIV positivo? Bueno, hay miles y millones de anticuerpos que tiene tu cuerpo ahora mismo. Si yo aíslo uno y hago una prueba para él, entonces yo puedo inventar un anticuerpo mañana. ¿Y los portadores de ese anticuerpo, ¿qué determinan? Si tú eres HIV positivo, es posible que tú tengas... Mira, HIV positivo te puede pasar después de una gripe, después de una enterectomia, lo puedes ser si has tenido problemas con el hígado, hepatitis. En otras palabras, HIV positivo no quiere decir que tú tengas SIDA.
P. En tu caso era sífilis, entonces.
R. En mi caso era sífilis. Mi esposa la tuvo por muchos años y no lo sabía y me la transmitió. Ahora, ¿cuál es la forma más fácil para una mujer contraer sífilis? Por el sexo anal. Eso no lo mencionan en ninguna de las campañas contra el SIDA. Una penetración anal para una mujer, una sola vez, por más saludable que esté, puede hacerla contraer sífilis. Y la puede tener en su cuerpo por 10, 15, 20 años antes de que en realidad le cause problemas de salud.
Ahora, vaginalmente es muy difícil contraer sífilis. La mujer tiene que estar muy débil y el hombre muy infectado para trasmitirle sífilis. Pero con una sola vez, aunque la mujer esté robusta y sana, con una sola penetración anal de un hombre levemente contaminado con sífilis, la puede contagiar.
Eso no lo mencionan en las campañas contra el SIDA, no mencionan que estas jovencitas de 15 y 16 años que quieren llegar vírgenes al matrimonio se dejan penetrar analmente y lo contraen, sólo por eso. Esas cosas no la dicen sobre la enfermedad. La campaña sobre la prevención de enfermedad venérea debería ser, no contra el SIDA, porque el SIDA conlleva una condena a muerte. Tú no le puedes poner una condena a muerte a una enfermedad.
El cáncer lo sabían curar desde 1930 y la sífilis, desde principio de siglo también. Sin antibióticos. Sin embargo, a cualquier persona que le diagnostican cáncer o SIDA lo condenan a muerte; ya ahí sicológicamente tú le estás quitando la esperanza de rebasar o de sobrevivir esa enfermedad. Eso es lo más dañino de esta campaña.
Si te da no llegas. ¿No llegas a dónde? ¿Por qué te dicen que no llegas? Porque te están dando quimioterapia como AZT. AZT es quimioterapia para leucemia, no tiene nada que ver con el SIDA y es un fármaco que lo prohibieron hace 27 años; lo sacaron de circulación porque era tan tóxico. Cuando lo inventaron, en los años 70, lo sacaron inmediatamente de circulación porque mataba a los pacientes más rápidamente. Y ahora, de repente, en los últimos ocho años lo utilizan para los que tienen SIDA.
Eso te dice algo: aquí hay un genocidio deliberado. Es un inmunosupresor, el AZT te destruye tu sistema inmunológico. No tiene lógica que te den un veneno, una toxina que destruye tu sistema inmunológico. A una persona que ya tiene problemas con su sistema inmunológico, que está inmuno deprimido, es como echarle gasolina al fuego para apagarlo. Habría más que decirte porque esto es muy profundo...

“La campaña sobre la prevención de enfermedad venérea debería ser, no contra el SIDA, porque el SIDA conlleva una condena a muerte. Tú no le puedes poner una condena a muerte a una enfermedad"